Los elementos que necesitamos son básicos: una caja de fosforos, cloro (no el humano), una jeringa y agua oxigenada.
En primer lugar agarramos una caja de fosforos. Cortamos todas sus cabezas y las introducimos en un recipiente o tubo.
Agregamos cloro y removemos bien para que se haga la mezcla, dejándola reposar unos 20 minutos, donde veremos que han aparecido dos capas. Extraemos con una jeringa la capa superior líquida.
Inyectamos este líquido en el tomate proporcionalmente con varios pinchazos y luego añadimos también proporcionalmente agua oxigenada y … ya tenemos tomates para la mesita de luz!
Aca esta el video explicativo:
En primer lugar agarramos una caja de fosforos. Cortamos todas sus cabezas y las introducimos en un recipiente o tubo.
Agregamos cloro y removemos bien para que se haga la mezcla, dejándola reposar unos 20 minutos, donde veremos que han aparecido dos capas. Extraemos con una jeringa la capa superior líquida.
Inyectamos este líquido en el tomate proporcionalmente con varios pinchazos y luego añadimos también proporcionalmente agua oxigenada y … ya tenemos tomates para la mesita de luz!
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